Érase una vez un pueblo donde las noches eran largas y la muerte contaba su propia historia. En el pueblo vivía una niña que quería leer, un hombre que tocaba el acordeón y un joven judío que escribía cuentos hermosos para escapar del horror de la guerra. Al cabo de un tiempo, la niña se convirtió en una ladrona que robaba libros y regalaba palabras. Con estas palabras se escribió una historia hermosa y cruel que ahora ya es una novela inolvidable.
"La novela, excepcionalmente narrada por la Muerte, el único ser que podía contarlo todo desde su privilegiado cometido, brilla como uno de los libros más duros, oscuros y trágicos, pero, a la vez, llenos de ternura, valentía, amistad y verosimilitud". José Luis Charcón, La Razón.
Esta novela llegó a mí en abril de 2008, gracias a mi gran amiga Auro. Sin embargo, no fue hasta noviembre del año pasado cuando me puse con esta lectura, a pesar de que ya lo había intentado previamente. Al poco tiempo de recibirlo, comencé a leerlo con muchas ganas (suele pasar siempre que el título y el argumento están relacionados con otros libros). Lo primero que me encontré hizo que me animara (siempre me ha gustado todo lo que tiene que ver con la representación de la Muerte y, en este caso, era la narradora). Pero algo falló, y a las pocas páginas, lo aparqué a un lado. Cuando volví a retomarlo hace unos meses, todo cambió. Creo que lo cogí en el momento idóneo, pues me dejó una de las mejores lecturas del 2010.
Cuando he empezado a escribir esta reseña, me he preguntado: "¿Qué voy a decir de novedoso sobre una novela tan conocida entre los lectores?". Tras esa pregunta, me vino a la mente una respuesta que hoy mismo le dejé a Carmen (del blog Carmen y amig@s) en su rincón literario: "Muchos pueden haber dicho algo sobre una obra, pero hay algo que nunca nadie podrá decir de cada historia que se publique: nuestra opinión. Al menos, no antes de que nosotros la expresemos". Y aquí estoy, aplicándome el cuento.
La ladrona de libros tiene un comienzo de esos que no se olvidan fácilmente, a pesar de las pocas palabras que el autor necesita para ello: "Primero los colores. Luego los humanos. Así es como acostumbro a ver las cosas. O, al menos, así intento verlas. Un pequeño detalle. Morirás". A partir de aquí, de estas frases que dan pie para el prólogo previo a la novela, se desarrollan las aventuras de Liesel, un personaje que consigue tener la simpatía del lector desde el primer momento, cuando observa por primera vez a esa niña en una instantánea: "Las lágrimas se habían helado sobre el rostro de la ladrona de libros". Los siguientes datos que se conocen sobre ella es que su hermano pequeño muere en el tren que la lleva hacia un hogar adoptivo. Es en ese momento en el que la Muerte ve por primera vez a nuestra protagonista. Liesel. Sin madre. Sin hermano. Sin familia. Adoptada. Y observada por la Muerte. Sin duda, un comienzo con muchos atractivos para cautivar durante sus más de 500 páginas.
¿Y en qué momento le ocurren estas desavenencias? Prácticamente al comienzo de la Segunda Guerra Mundial. Tranquilidad para los que unos datos históricos supongan un obstáculo en una novela. Si sabes cuándo ocurrió, quién gobernaba, quiénes eran los opresores y quiénes los oprimidos, adelante, continúa. El avance de las tropas de Hitler no es sino un elemento que se queda en el trasfondo de la historia, para contextualizar los puntos necesarios y poder entender muchos de los componentes de la trama, pero sin enturbiar el desarrollo del argumento. Y quizás lo mejor que tenga la elección de este escenario es la creación de Max.
Sin duda, Max ha sido mi personaje favorito de La ladrona de libros. Un judío que, como tantos otros, se ve obligado a huir debido a un líder político que, en su particular y descabellada ideología, persigue la reclusión de los judíos en campos de concentración, así como su exterminio. Max aparecerá en la vida de Liesel y de sus padres adoptivos, Hans y Rosa, para regalar muchos de los grandes momentos de este relato. Gracias al establecimiento de una serie de "normas", como la que lleva a Max a vivir en el sótano de la casa, los miembros de esta particular familia comienzan a enriquecer sus sentimientos y experiencias, a través de anécdotas, conversaciones o simples miradas. En esas paredes que se convierten en el nuevo hogar de los dos grandes protagonistas, se fraguan los recuerdos más entrañables de La ladrona de libros, al menos, quedan ahí los que se mantuvieron grabados en mi mente (como el aprendizaje de la lectura que Liesel realiza con una voluntad pasmosa, o el libro que Max prepara para su pequeña amiga).
Mucho más puede decirse de las líneas argumentales, pero sería quitarle magia a este cuadro de guerra, donde los valores priman sobre cualquier otro acontecimiento. Increíble historia, de principio a fin. Un libro lleno de emociones y sentimientos, pero de una gran dureza. En otras palabras, La ladrona de libros se convierte en un mínimo reflejo de lo que puede suponer para una persona la peor de las guerras.
Valoración: 5 / 5
"Cuando la muerte venga por mí, sentirá mi puño en su cara".
Me leí esta novela un poco a la aventura, porque me la recomendó la chica del bibliometro de al lado de casa, y me gustó mucho. También mi personaje favorito es Max, sin duda. :-)
ResponderEliminarLa leí hace unos meses pero quizás por las expectativas puestas en ella o porque había leído justo antes otras dos protagonizadas por niños en esta época, no me apasionó. Me gustó pero con matices. Aunque reconozco que es un libro muy bueno. Saludos!
ResponderEliminarUno de mis libros favoritos, por lo bonita que me resultó la lectura y por lo que disfruté de su lectura. Me alegro que hayas disfrutado taanto. Besos
ResponderEliminarLeí este libro hace tiempo, si no recuerdo mal fue el segundo o tercer libro que reseñe en el blog que ya va para tres años. Me conmovió la lectura, me gusto la narradora aunque en un principio me descoloco. Me gustó esa visión de que en Alemania n todo el mundo cayó en las redes de Hitler, que no todos se tragaron su discurso. Me gustaron mucho los cuentos que Max le escribe a Liesel, sobre todo ese que habla sobre el poder de las palabras. Me pareció un libro redondo, un libro de diez, un libro de esos que permanece en la memoria mucho tiempo despues de haberlo leido. Un libro que emociona y que recomiendo siempre que puedo...
ResponderEliminarTienes razón, por cosas que se hayan dicho de un libro, hay una que nadie puede decir por tí y que por lo tanto resulta novedosa, tu opinión y los sentimientos que la lectura ha motivado en tí.
besotes
Espe, me alegra saber que coincidimos en personaje favorito. Su creación fue todo un acierto para darle más vida a la trama de la novela. :D
ResponderEliminarTatty, ¡cómo te entiendo! La de veces que he leído un libro lleno de expectativas y al final ha afectado a la impresión general. Y la cosa es que no seguirá pasando, jajaja.
M., como digo, la primera vez lo aparqué, pero la segunda ya lo disfruté al completo. En mi caso, no formará parte de mis libros favoritos, pero sí de las mejores lecturas de 2010.
Carmina, coincido plenamente con cada pensamiento que has plasmado en tu comentario. :) Espero que ya te encuentres mejor. Besos.
Leí este libro hace por lo menos dos años, pero aún no lo he olvidado. Y eso dice mucho a favor de un libro. Me gustó mucho el personaje de Max, pero la verdad es que Liesel me encandiló. Su forma de aprender a leer, su afición por la lectura, que le llevó incluso a "robar"...
ResponderEliminarEn fin, que me encantó el libro.
Besotes!!!
Me gustó mucho este libro. El personaje de Max me gustó, pero mi personaje favorito, sin duda, es Hans, el padrastro de Liesel. Una novela conmovedora y distinta. Un abrazo
ResponderEliminarMargari, a mí me gustó más Liesel al principio, con su soledad y su deseo por aprender a leer. Luego me cansaba un poco, y sólo quería que se encontrara con Max, que eran las escenas que realmente me gustaban. Pero bueno, nuestra conclusión es la misma, que nos encantó. ¡Besos también para ti!
ResponderEliminarSaramaga, el personaje de Hans también es muy atrayente, sobre todo cuando se empieza a descubrir su historia. Es que no falta de nada en esta novela. ¡Abrazos!
Otra vez yo por aquí. Mira que estoy "pesá". Ahora sólo pasaba para decirte que hay unos premios esperándote en mi blog.
ResponderEliminarLo compré el año pasado y aún lo tengo esperando en la estantería... y eso que no he visto ni una mala opinión sobre este libro.
ResponderEliminarBuena reseña =)
Un besote!
Margari, ¡de pesada nada! Yo encantado de que pases por aquí cuantas veces quieras. ;) ¡Voy a ver ahora mismo eso que me cuentas de los premios! :D
ResponderEliminarShorby, ¡adelante con esta novela! No te decepcionará. ¡Y gracias por tus palabras! ;) ¡Besos!
Yo leí este libro hace como 2 años (ya un buen...), me llamó de inmediato en la librería. En ese entonces yo recién me había planteado leer 50 libros en el año y los iba comentando (que no reseñando) en MySpace...
ResponderEliminarMe pareció un libro muy bueno. La historia en sí es maravillosa, y ahí podría quedarme... pero no, la narrativa es muy, muy buena, y el hecho de que sea la misma Muerte la que nos lleve de la mano por los años de la segunda guerra mundial, es un punto a favor del libro. Sus comentarios al margen de la historia, simplemente me encantaron. Me has hecho recordar todos los buenos momentos que pasé entre saumenchs, saurkels y watchens... Recuerdo que reí y lloré leyendo a Markus Suzak. Un libro memorable.
Por cierto que mi personaje favorito es Hans. Si me gustó mucho Max y Liesel, pero ese cariño forjado entre letras y palabras me pareció envidiable.
En fin... Después de mi comentario extensísimo...
Me da gusto que hayas disfrutado el libro.
Saludos!!!
Este es uno de los libros que tengo pendiente de leer y no por falta de ganas! Me ha encantado tu reseña y además me has hecho recordar que todavía lo tengo pendiente ;)
ResponderEliminarbesotes
Kyra, gracias por extenderte con tu comentario, es fácil ver en tus palabras todo lo que te hizo vivir ese libro. Como decía más arriba, Hans también es un personaje entrañable. Y lo de la Muerte como narradora fue lo que me animó a descubrir esta historia. ¡Saludos!
ResponderEliminarSonia, ¡estaré esperando tu reseña cuando te animes a leerlo! ¡Seguro que no te defrauda! ¡Más besos!
Enhorabuena por este pequeñito pero currado blog. Te sigue Mr Sandman desde El Creador de Sueños.
ResponderEliminarSiempre me ha gustado el escenario de las grandes guerras, me parece audaz colocar ese contexto y darle rienda suelta a la ficción desde ese lugar sin caer en la incoherencia, la muerte por otro lado siempre me ha atraído en su simbología y lo que representa para el ser humano, hay mucho de reflexivo en ello, no solo de dolor sino de aceptación y de meditación de la condiciñon humana. Éste libro me ha gustado, desconocía su trama aunque me dices que todos la conocen, eso sí lo había visto pero no me había demorado en averiguar sobre él, ahora lo he hecho y puede ser reconfortante leer el libro. Un abrazo.
ResponderEliminarPD: Te invito a mi bitácora, a ver si te animas a seguirme y yo también, para compartir de literatura, ahora mi espacio es de cine pero volverá a ser también de letras, pasión que me envuelve a su vez.
Mario.
Mr. Sandman, ¡gracias por tus palabras! Me ha hecho mucha ilusión tu comentario. ¡Ahora me paso por tu blog! Por cierto, he visto en tu perfil que aparecen varios. ¿Todos son tuyos? ¡Saludos!
ResponderEliminarMario, muchas gracias por pasarte por este rincón. Coincidimos en eso de la simbología de la muerte, es un tema que siempre me apasionado (quizás por eso me guste tanto la mitología). Me alegra que hayas descubierto más sobre este libro. Si finalmente lo lees, esperaré tus impresiones encantado. ¡Y muchas gracias por tu invitación! Me paso ahora por tu blog y te añado a la columna de la derecha. Abrazos.
Muy buenas Jesús, has dado con uno de mis libros preferidos :-) No me canso de hablar de la historia de La ladrona de libros y creo que me he puesto hasta pesada recomendándola en mi blog, jeje.
ResponderEliminarMe parece una historia a la que no le falta de nada. Es dulce, tierna, dura, conmovedora... no sé, yo creo que lo tiene todo.
A mí la historia de Rudy y Liesel también me gustó mucho.
Ay!! Lo que lloré con este libro!!!
Besos!! Buen finde!
Narayani, ¡es que esta historia es para recomendarla! En tus palabras se recogen muy bien los sentimientos que produce la historia de Liesel y la de sus compañeros de camino. ¡Entiendo que se te escapara alguna lágrima! Espero que podamos compartir otras tantas lecturas tan maravillosas como ésta.
ResponderEliminar¡Besoooooos!
Estoy de acuerdo en tu valoración, es un libro diferente que esconde detrás una historia tremenda escrito con la sencillez engañosa de los ojos de una niña. Muy buena reseña.
ResponderEliminarUn saludo.
Antonio, ¡muchísimas gracias por tus palabras! Espero que coincidamos en más lecturas. ¡Saludos!
ResponderEliminarMe encantó este libro! Y tu reseña también. Enhorabuena!
ResponderEliminarMaría, ¡mil gracias! ;)
ResponderEliminarMe encantó la lectura de este libro, y desde luego el personaje de Max es destacable, pero a mi incluso llegó a gustarme más el personaje de la muerte, a pesar de lo tétrico, en ciertos momentos me resultó simpática. Una gran obra, y más sabiendo que los padres del autor vivieron esa cruel realidad.
ResponderEliminarY me alegro que le dieses una segunda oportunidad a este libro.
Un abrazo
Blanca, el personaje de la Muerte es maravilloso, principalmente por el atractivo de que sea la narradora. Creo que es de lo mejor de la novela. Su intervención final es memorable.
ResponderEliminar¡Un abrazo!
Leí este libro hace un tiempo y me encantó. Muy recomendable.
ResponderEliminarTe felicito por su reseña. Un abrazo.
Luisa, ¡mil gracias por tus palabras! ¡Abrazos!
ResponderEliminarHola soy Shannon de Costa Rica y soy nueva en esto de los blogs jajaja. Este libro se ha convertido en uno de mis favoritos, una historia preciosa donde me identifiqué con Liesel y su pasión por la lectura... Un libro memorable!!!
ResponderEliminarPD. Me gusta mucho tu blog!!! Te sigo!!!
Shanny, ¡bienvenida a mi pequeño rincón! Me alegra mucho haber podido reseñar uno de tus libros favoritos. Entiendo perfectamente que sea así, esta historia es inolvidable.
ResponderEliminar¡Muchas gracias por seguirme! ¡Abrazos!
Hola Jesús, curioseando por tu blog vi este libro, que para mí ha sido muy especial tanto por lo mucho que me caló (es una historia que engancha y te hace sufrir al lado de sus personajes), como por el momento que vivía: una reciente maternidad muy dura y hermosa a la vez....
ResponderEliminarTrinita, me alegra que te hayas reencontrado con este libro gracias a mi blog, y que compartas conmigo lo especial de esta novela para ti. Un beso enorme. Bienvenida. ;)
ResponderEliminarEste es sin un duda un libro que te deja huella y que te hace pensar. Leyendo tu reseña he recordado que a mí me pasó algo parecido: abandonar un libro porque no puedes con él, al cabo de un tiempo volverlo a intentarlo y acabar pensando que es uno de los mejores que han pasado por tus manos. Me ocurrió concretamente con "Cien años de soledad", una gran obra.
ResponderEliminarSaludos
Marian, antes de nada, ¡bienvenida! Eso que cuentas es lo que me pasó con "La ladrona de libros". La primera vez apenas pude pasar de las veinte páginas iniciales. Se quedó en la estantería mucho tiempo. Y en un nuevo intento, lo leí casi sin darme cuenta. "Cien años de soledad" es una de mis asignaturas pendientes, ¡tengo que leer esta novela! ¡Saludos!
ResponderEliminarMuy buena la reseña :) Y estamos en línea en casi todos los puntos, principalmente en el tema del escenario de ambientación de la novela. A mí personalmente me ha gustado más la protagonista, la ladrona de libros, aunque Max le da un toque de ternura y coraje adicional a la obra.
ResponderEliminarYo sólo la he conocido recientemente, pero sin duda es una novela de lectura muy recomendada y que casi se me había escapado! :)
Offuscatio, muchas gracias por tus palabras. Como ya comenté en tu blog, nuestras reseñan mantienen muchos puntos en común. ¡Por suerte llegaste a tiempo para descubrirla! Y, por supuesto, como bien dices, una lectura recomendable. ¡Saludos!
ResponderEliminar